El 93% de las consumidoras y consumidores españoles consideran necesario fijar un precio máximo a los alimentos básicos para frenar las subidas desorbitadas. El respaldo en España a topar los precios de los alimentos de la cesta básica, como se hizo con las mascarillas o los test en la primera fase de la pandemia, es mayor que en el resto de los países que forman parte del estudio. En Austria, las opciones que apoyan estas medidas sumaban un 91% de las respuestas, porcentaje que se reduce al 82% en Francia y Alemania, y al 80% en Holanda y Reino Unido.
Mientras el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, recomienda “irse al supermercado de en frente si no está de acuerdo con los precios”, el Gobierno francés ha presentado este pasado lunes un acuerdo con los grandes supermercados que han aceptado reducir sus márgenes de beneficio con una cesta de productos básicos a precios bloqueados.
En nuestra legislación la Ley de Comercio Minorista prevé que el Gobierno podrá fijar los precios o los márgenes de comercialización de determinados productos de primera necesidad.