El Gobierno logra un acuerdo en Europa para reducir el precio de la luz a la mitad, a pesar de las presiones en contra del oligopolio
La Comisión Europea ha dado este martes 26 de abril su visto bueno a la propuesta española y portuguesa para limitar el precio del gas y del carbón que alimentan las centrales de generación de electricidad y rebajar a la mitad la factura de la luz para las personas consumidoras con tarifa de electricidad regulada PVPC. “Hay un acuerdo político”, ha anunciado en Bruselas la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para Transición Ecológica, Teresa Ribera, en una rueda de prensa conjunta con su homólogo portugués, Duarte Cordeiro, según informa el El País. Esta nueva regulación se aprobará en el próximo Consejo de Ministros y Ministras y estará vigente a partir del próximo mes de mayo.
Con este acuerdo con la Comisión Europea, España y Portugal podrán limitar el precio del gas y el carbón para las centrales eléctricas a 40 euros por megavatio hora (MWh), 10 euros más de lo propuesto inicialmente por los responsables de España y Portugal. Bruselas obliga a que este tope suba progresivamente hasta alcanzar los 50 euros en la media del periodo en los 12 meses en los que estará activo este mecanismo de urgencia. Esta medida propiciará una bajada sustancial en la factura de la luz en el mercado regulado hasta la mitad de lo que se paga actualmente. Desde los más de 200 euros actuales del megavatio hora quedaría en el entorno de los 130 o 140 euros por MWh, ya sumado el coste de los derechos de emisión de CO₂.
En un comportamiento que no tiene otra denominación que “antipatriotico” y “usurero”, las empresas del oligopolio eléctrico (Iberdrola, Endesa, Natrugy, Repsol, EDP y Total Energies) llevan semanas maniobrando y presionando ante las instituciones europeas (ver aquí) para que no se ponga un tope al precio del gas de las centrales de ciclo combinado y con ello bajar el precio de la factura de la luz a los hogares, establecimientos y pequeñas empresas. Las grandes eléctricas consideran que “no hay en absoluto una ganancia inmerecida” por cobrar toda la electricidad al precio de la más cara de producir. Esto es, a las grandes eléctricas les parece “normal” el denominado “modelo marginalista” de fijación de precios, el cual, como explica el periodista Javier Ruiz, “es como comprar 999 gramos de jamón barato y 1 gramo de 5 jotas y pagarlo todo al precio de 5 jotas. Así funciona nuestro sistema”.
Desde la Unión de Consumidores de Asturias exigimos al Ministerio de Transición Ecológica que acabe de una vez por todas con el injusto mercado marginalista que viene generando abultados e injustos beneficios al oligopolio. Una regulación que con la desorbitada subida acumulada en los últimos meses por el gas —que quintuplica su precio— ha disparado de los precios de la electricidad para las personas consumidoras. No es de recibo un mercado al que tengamos que pagar toda la energía eléctrica al precio de la tecnología más cara (en muchos casos, el gas), fijando el precio de la producción de esa tecnología y también la del resto.